La disciplina y constancia a la hora de entrenar es una tarea que requiere compromiso, pero resulta difícil cumplir con una rutina cuando toca ir solos al gimnasio; por ello conviene encontrar un buen compañero al que le agrade también hacer ejercicio y comparta las horas de entrenamiento contigo.
Al estar acompañado, existe un estímulo para realizar el entrenamiento programado, bien sea para tranquilizarte y fortalecerte en ejecutar correctamente los ejercicios, o para que te motive a concluir el entrenamiento con más ánimo.
Convierte a tu compañero de gimnasio en tu mejor estrategia para cumplir tu entrenamiento eficientemente.

5 razones para entrenar con un compañero
1. Te motiva a ejecutar completamente el entrenamiento
Contar con un compañero de gimnasio que te motive y estimule a lograr tus metas en el entrenamiento es estupendo, porque hasta podrías culminar las sesiones más rápido que si fueras solo, aparte que te ayudará a confiar más en ti mismo para realizar cualquier ejercicio.

2. Fomenta a mejorar y aumentar el rendimiento
Al entrenar solo, normalmente se hacen las mismas rutinas de ejercicios; pero si tienes un buen compañero de gimnasio te incentivará a que realices otros ejercicios que te ayuden a obtener mejores resultados. También te puede fomentar a aumentar las series de diferentes ejercicios fundamentales e incrementar el rendimiento en tu programa de entrenamiento.

3. Apoya y fortalece emocionalmente
Hay momentos en los que sientes que ya no puedes más, te agotas o desanimas y quieres tirar la toalla, más aún, si tienes algo que te está estresando. En este caso, un amigo que esté disponible a acompañarte durante tu entrenamiento es ideal para apoyarte emocionalmente y fortalecerte para que culmines tu rutina con éxito.
Otro apoyo que puedes conseguir de tu compañero de gimnasio es que te motive con palabras de aliento mientras entrenan, esto podría ayudarte en esas circunstancias donde necesitas fortaleza emocional.

4. Entretiene y hace divertida la rutina
Es normal que hacer ejercicio se haga una tarea monótona si no tienes con quien conversar en los momentos de pausa o descanso; por eso, te podría convenir invitar a un amigo que también entrene para que te acompañe y así tener con quien entretenerte, charlar y hasta reíros contándoos anécdotas: eso anima a terminar las rutinas sin que te des cuenta el tiempo que ha transcurrido y realizarlo de manera más divertida.

5. Brinda mayor seguridad al realizar ejercicios más difíciles
Realizar el entrenamiento con mayor seguridad es una tarea que se facilita cuando un compañero de gimnasio te ayuda, sobre todo a la hora de levantar pesas indicándote la técnica más adecuada para ti, para ajustar el peso acorde o para colaborar contigo si en algún momento te aprisiona la barra contra el pecho, evitando así que sufras algún tipo de lesión.

Conclusión
Es impresionante lo útil que un compañero de gimnasio puede ser para culminar con éxito tu entrenamiento diario. Para que esta persona te sea de utilidad, debe ser fiable, apoyarte, ambos debéis de tener una rutina de entrenamiento similar y convenir un horario que os sirva a ambos para coincidir y entrenar juntos.
Referencia
- Osnato, J. 7 Reasons Your Gym Buddy Is Totally Awesome Para Livestrong [Revisado en noviembre de 2019].