Dicen que viajar es uno de los mejores remedios que existen. Y es que, ¿no te parece excitante la idea de ir a otros lugares y aprender sus culturas? Es realmente enriquecedor y satisfactorio.
Sin embargo, ¿sabías que viajar también ayuda a tu salud? Está comprobado que las personas que viajan a menudo rejuvenecen su espíritu y mente.
La mente lo controla todo, al hacer cualquier tipo de actividad que en realidad te llene, el cuerpo también se beneficia. Por eso, debes conocer 6 razones para viajar y beneficiar a tu salud.
5 razones para viajar al extranjero y beneficiar a tu salud
1. Te relaja
A todos nos encantan las vacaciones, no importa si son largas o cortas. Tener de vez en cuando un respiro es requisito fundamental para ser una persona 100% productiva. El estrés y la ansiedad que acumulas diariamente debido al trabajo y las responsabilidades disminuyen cuando estamos de vacaciones, y más aun cuando hacemos uso de ellas viajando a lugares a los que nunca hemos ido.
Si eres una persona obsesiva o adicta al trabajo, lo más recomendable es que el destino que elijas para viajar esté lo más alejado posible a tu realidad y en donde las zonas horarias no coincidan. De esta manera, te será difícil mantenerte conectado al mundo laboral y podrás disfrutar mucho mejor de tus merecidas vacaciones. Por algo se llaman así, ¿no?
2. Disminuye el riego de enfermedades cardíacas
Al igual que el ejercicio físico, viajar también ayuda a disminuir el riesgo de enfermedades cardíacas. Todo se ve desde una mejor perspectiva al viajar, conocer otras culturas y tratar con personas de diferentes pensamientos. Todo esto realmente favorece a la salud cardiovascular.
Hay estudios que demuestran que las personas que viajan con regularidad por placer son menos propensas a sufrir ataques cardíacos o alguna enfermedad coronaria, en comparación con las que sólo viajan por negocios o no lo hacen.
Por todo ello, si estás bajo constantes situaciones de estrés o ansiedad, es imperativo que te tomes un respiro. La vida no sólo se trata de trabajo y responsabilidades. Tómalo con calma, empaca tus maletas y reduce estos riesgos.
3. Reduce el riesgo de sufrir depresión
Los estados anímicos tales como la depresión, tristeza y ansiedad son realmente difíciles de combatir. La depresión no sólo afecta el estado de ánimo, sino que también afecta los niveles de glucosa en la sangre, la salud cardiovascular, el sistema inmune y las hormonas del estrés (cortisol, serotonina, adrenalina).
En cambio, las personas que viajan son felices, ríen más, y se encuentran más relajadas debido a que no tienen preocupaciones en ese momento, y dejan su mente en blanco. Por ende, dichas personas son menos propensas a sufrir depresión o cualquier estado o pensamiento anímico negativo. Es casi tan bueno como la meditación. ¡Inténtalo!
4. Amplía tus perspectivas acerca de la vida
Estar en contacto con otro tipo de personas, culturas, historias y gastronomía, hace que tu mente sea más abierta a nuevos cambios y situaciones. Te hace una persona más segura de ti misma, te vuelve más perceptible a todo lo que te rodea, y sobre todo más empático con las personas. Además. atraviesas situaciones que te hacen pensar y reflexionar, mejora tu semblante, y cambia totalmente tu forma de pensar.
Viajar es tan saludable como hacer cualquier actividad que te apasione. Conoces el punto de vista de otros y aunque no los compartas, ganas tolerancia en el camino. Favorece tus relaciones interpersonales, te ayuda a ser una persona más sociable y expande tus horizontes.
Ten por seguro que cuando tomes tus maletas y te vayas al lugar más alejado que puedas, no serás el mismo.
5. Te ayuda a hacer ejercicio
Las personas que constantemente están metidas de lleno en su rutina diaria y laboral, tienden a dejar de lado el ejercitarse. El sedentarismo es el hábito más mortal que existe para el ser humano. De allí provienen muchísimas enfermedades y condiciones tales como la obesidad, diabetes, colesterol y triglicéridos altos, estrés, depresión y deficiencia en las habilidades sociales.
Cuando viajas, haces ejercicio. Ten por seguro que si. Te animas a visitar los lugares más emblemáticos del lugar, conocer sus museos, los barrios, la gastronomía y su cultura; y todo esto, caminando. No sólo eso, te ayuda a atreverte a hacer cosas que normalmente no harías, como escalar una montaña, bucear, y practicar cualquier deporte que esté relacionado con el país que visitas.
Conclusión
Sal de tu zona de confort. Existe un mundo allí afuera, no te limites y conformes siempre con los mismo. Una persona que de verdad necesita un respiro o unas largas vacaciones se caracteriza porque:
- Es adicto al trabajo y a su rutina, y a pesar de que le encante lo que hace es nocivo para su salud.
- Tiene una carga de estrés impresionante y esto puede conllevar a problemas graves con la depresión.
- No desarrolla bien sus relaciones interpersonales, convirtiendo al individuo en una persona aislada y con dificultad para congeniar.
Para corregir todos estos males, no hay nada como viajar. Busca información acerca de destinos turísticos que te puedan interesar, reserva tu billete y haz tu maleta. Probablemente sea lo que lo necesites para salir de esa situación de estancamiento en la que te encuentras.
Referencia
- Manning-Schaffel, V. 8 Ways traveling abroad makes you healthier. Para Livestrong [Revisado en Octubre de 2017]