Puede que tu solución a una vida sedentaria sea ir al gimnasio 2 veces por semana, pero la realidad es que tus hábitos alimenticios y rutinarios representan también una gran parte de tu salud en general. Por ello, si deseas tener ese cuerpo ideal o mejorar como te sientes deberías hacer algunos cambios en tu vida.
Entrenar es muy beneficioso siempre y cuando seas constante en tu día a día, y en especial luego de la sesión de ejercicio. De esta manera, no solo verás mayores resultados en tu cuerpo, sino también en tu mente y estado de ánimo.
Luego de tu próxima clase o sesión de entrenamiento, recuerda los próximos 7 consejos sobre que no debes hacer después de entrenar, a fin de no volver a cometerlos.

7 errores que cometes luego de entrenar
1. Revisar tu teléfono inmediatamente
Limitar la cantidad de tiempo que pasas con tu teléfono móvil es difícil y muchas veces nos dejamos llevar durante el día, pero es imprescindible que durante el tiempo que entrenes estés totalmente concentrado en los ejercicios que debes realizar.
Al finalizar, aunque estés ansioso de volver a la realidad y enterarte de las nuevas noticias en las redes sociales, recomendamos que te tomes un tiempo para recuperarte. dale a tu cerebro un poco de espacio para reflexionar y pensar, no te apresures a volver a la tecnología de inmediato.
Verás que al principio es difícil, pero con el tiempo te acostumbrarás a dejar el teléfono de lado.

2. Olvidarse de estirar
La regla número uno para recuperarse después de una ardua sesión en el gimnasio es hacer los estiramiento necesarios.
Cuando ejerces mucha presión en tus músculos, estos se rompen para luego volver a recuperarse con una mayor resistencia, pero si no facilitas su recuperación, estarás exigiéndole demasiado a tu cuerpo y produciendo fatiga. Esto puede llevar a que se generen diferentes lesiones y, en consecuencia, entrenamientos menos óptimos.
Lo recomendable es que mantengas cada estiramiento al menos 30 segundos y repetirlos dos o tres veces, aunque si estás presionado por el tiempo puedes reducir la cantidad.
Una buena opción para realizar los estiramientos después de entrenar de manera adecuada es contar con la ayuda de un entrenador o supervisor que sepa sobre el tema y te aconseje sobre lo mejor para tu tipo de cuerpo.

3. Hacer otras actividades con tu ropa de entrenamiento
Cambiarte de ropa después de entrenar debería ser una de tus prioridades luego de estirar los músculos. Intenta no demorarte demasiado tiempo charlando o haciendo otras actividades cuando estás cubierto en sudor, ya que puede afectar gravemente a tu sistema inmunológico.
Esto se debe a que tu cuerpo necesita equilibrar sus niveles de temperatura y quitarse el exceso de calor, tarea difícil de realizar cuando la tela de tu ropa está en todavía ahí. Además, eres más propenso a contraer infecciones relacionadas con los hongos, particularmente si asistes a un gimnasio con muchas personas que comparten las mismas maquinarias. Por eso, debes tratar de tomar las precauciones necesarias.

4. Comer demasiado justo después de entrenar
Cuando salimos de entrenar, sentimos una sensación de victoria y muchas veces pensamos que merecemos una recompensa por el trabajo arduo. Por eso, no es casual que luego de una buena sesión el gimnasio tengas ganas de comerte una gran hamburguesa o una pizza entera. Sin embargo, tu estomago no estará muy contento al respecto, ya que necesita al menos 30 minutos para repararse a sí mismo.
La próxima vez que tengas que entrenar, asegúrate de llevar algo ligero y no procesado para consumir, como una pieza de fruta, y espérate a comer algo más consistente unas 3 o 4 horas. Tu sistema digestivo te lo agradecerá.

5. Consumir vitaminas y suplementos
Comúnmente se cree que consumir vitaminas y suplementos para complementar nuestro entrenamiento es una buena idea. Por ejemplo, muchas personas deciden tomar antiinflamatorios y pastillas que promueven la recuperación temprana para no sentir tanta fatiga luego de entrenar.
Sin embargo, debemos pensar nuevamente sobre nuestras decisiones, ya que nos puede estar haciendo un mayor mal que bien. La razón es que todos estos componentes intervienen con la adaptación que produce nuestro cuerpo luego de entrenar, y al final, desecha todo el esfuerzo que invertimos en nuestra rutina.
La mejor opción en estos casos es hablar con tu doctor de confianza y discutir con él acerca la ingesta de estos suplementos, ya que si tomas otros medicamentos puedes sufrir de efectos secundarios inesperados. Además, deberías consultar a un nutricionista que sepa asesorarte sobre qué suplementos consumir.

6. Medir tu peso corporal
Esta es una de las peores ideas que puedes tener luego de hacer deporte. En primer lugar, porque no es bueno para ti ser dependiente de un número en la báscula y, en segundo lugar, porque es suficiente con el hecho de que te esforzaste al máximo en tu sesión.
No es saludable para tu mente obsesionarse con un peso ideal, ya que al final solo afectará de mala manera a tu forma de entrenar.

7. Tomar alcohol
Beber alcohol cuando tu corazón todavía tiene un ritmo acelerado por el entrenamiento que acabas de hacer es una de las peores cosas que puedes hacer, ya que te afectará más rápido y duro de lo que normalmente lo hace.
Además, no solo estarás ebrio en pocos minutos, sino que el alcohol reducirá la síntesis de proteínas en tus músculos, lo que producirá una recuperación más lenta, minimizará los beneficios de tu entrenamiento y te sentirás mucho peor el día siguiente.
Referencias
- Natasha, B. 10 Things You Should Never Do After a Workout. Para Livestrong. [Revisado en Agosto de 2019].