Es normal que en nuestra vida sexual experimentemos altos y bajos, como es común en la mayoría de aspectos de la vida. Muchas veces es de forma voluntaria, como querer concentrarse en otros proyectos o aspectos de la vida, y otras veces es involuntario por una gran variedad de motivos. como puede ser el fin de una relación o problemas de estrés en la relación actual.
Lo cierto es que, en los momentos de baja en la actividad sexual, nuestro cuerpo experimentará ciertos cambios que pueden afectarnos de manera negativa y es bueno estar al tanto de ellos. Con esta información podremos saber si podemos tolerar esos cambios o si debemos hacer algo al respecto, en cuanto a nuestra actividad sexual.
10 cosas negativas que experimentamos al dejar de tener sexo
1. Menos endorfinas
Los orgasmos y la excitación en general, normalmente causan la liberación de químicos en nuestro cuerpo, que nos hacen sentir bien (endorfinas). Estos químicos están asociados con un incremento en el buen humor, e incluso ayudan a aliviar dolores.
Al dejar de tener sexo por periodos de tiempo prolongado, probablemente notemos la ausencia de esas liberaciones de endorfinas. De la misma manera sucede cuando dejamos de hacer ejercicio cuando ya nos hemos acostumbrado a ese sentimiento de bienestar que genera el esfuerzo físico.
2. Más estrés
Quizás hayas notado en algún momento un estado de relajación notable después de una sesión de sexo. Este sentimiento es, de hecho, una de las razones principales por las cuales las personas buscan tener relaciones. No obstante, esa sensación se puede perder si arrebatamos completamente de nuestras vidas la experiencia sexual.
Aunque existen otras maneras de controlar el estrés fuera del sexo, notarás que es común que tu nivel de actividad sexual está ligado de forma inversa a tus niveles de estrés. Sin embargo, también se ha comprobado que bajo una buena dosis de estrés, el mismo hecho de tener sexo pierde atractivo.
3. Menos satisfacción en la relación
Este caso se aplica para quienes mantienen baja actividad sexual aun estando en un cuadro de relación monógama. Al presentarse esta situación, se puede notar un evidente deterioro en la conexión que siente la pareja, lo que lleva directamente a sentirse menos satisfecho en la relación.
Se cree que esto se puede deber a que durante el orgasmo se libera un químico en el cuerpo llamado oxitocina, la cual ayuda a crear un sentimiento de confianza y aprecio y ayuda a ver a tu pareja de manera más positiva.
4. Baja autoestima
Pasar a un estado de actividad sexual nula puede afectar no solo nuestra relación con los demás, sino incluso nuestra relación con nosotros mismos. La falta de sexo nos afecta de manera psicológica y emitimos juicios perjudiciales contra nosotros mismos, lo que lleva a casos de baja autoestima. Esto, inevitablemente afectará al resto de nuestras relaciones.
5. Disfunción eréctil
En un estudio publicado en The American Journal Of Medicine en el 2008, se reportó que los hombre que mantenían relaciones sexuales al menos una vez a la semana tenían la mitad de posibilidades de experimentar disfunción eréctil que aquellos hombres que tenían sexo menos frecuentemente.
Es obvio que este no es el único motivo que puede causar disfunción eréctil, pero sin lugar a dudas juega un rol y tiene su efecto. Además, una vez que se presenta la disfunción eréctil puede haber incluso menos sexo, ya que los hombres en esa situación tienden a evitar completamente el sexo.
6. Una vagina menos saludable
Una actividad sexual vaginal regular, ya sea en pareja o de manera solitaria, estimula la salud vaginal. Esto se vuelve particularmente importante para mujeres de mediana edad o más debido a que la resequedad y una menor elasticidad son resultados comunes de cambios hormonales.
Los juegos sexuales estimulan el flujo sanguíneo hacia los genitales, ayudando a los músculos vaginales a mantenerse estimulados y saludables, además de mantener su estado de elasticidad actual. De la misma manera que el punto anterior, este aspecto ayuda a mantener al sexo como una opción bastante atractiva.
7. Menos lubricación
En los momentos en que te mantienes sexualmente activo, probablemente notes, que la humedad y lubricación juega un papel importante en la excitación. Si una mujer no se siente excitada regularmente, o ni siquiera un poco, experimentará sequedad vaginal. Esto se debe a que la excitación estimula las glándulas que producen excitación en la vagina.
Aunque pueden existir otros motivos por los cuales se puede sentir resequedad en los genitales femeninos, como desequilibrios hormonales, es cierto que la falta de actividad y estimulación sexual, juegan un papel importante.
Para remediarlo, puede ser útil incluso la masturbación.
8. Bajos estados de ánimo
A veces es difícil saber cual viene primero, si la actividad sexual baja, o los estados de ánimos bajos, pero lo cierto es que se ha observado una intima relación entre ambos.
Si te sientes desanimado o incluso deprimido, lo más probable es que estés menos interesado en el sexo. No obstante, es importante destacar que debido a las ventajas que trae tener sexo regularmente, es muy probable que al parar de tenerlo, repentinamente, tengamos bajones en el estado de ánimo.
9. Menos beneficios para la salud cardíaca
Aquí nos encontramos con otra posible contradicción. Mientras que el sexo ayuda a minimizar el estrés y nos ayuda en nuestra salud cardíaca, el estrés y un estado cardíaco débil pueden interferir en la excitación y por tanto reducir la actividad sexual.
Aunque es cierto que tener sexo regularmente no nos previene de sufrir enfermedades cardiovasculares, son innegables los beneficios que nos brinda en ese ámbito.
10. Menos capacidad inmunológica
En los anteriores puntos hemos recogido una serie de aspectos que afectan los niveles químicos del cuerpo, lo que afecta directamente al sistema inmunológico.
Un cuerpo sin estrés y relajado y con niveles químicos en orden, tiene muchas más posibilidades de evitar amenazas que podrían penetrar un sistema inmunológico débil.
Conclusión
Como vemos, mantener relaciones sexuales periódicamente brinda varios aspectos positivos a nuestra salud física y mental. Por lo tanto, eliminar completamente el sexo normalmente resulta en la ausencia de esos aspectos positivos.
Para evitar problemas y tener esas grandes ventajas, lo mejor siempre será mantener esa actividad sexual dentro de los parámetros normales, aunque también se pueden conseguir dichos beneficios a través de otros métodos.
Referencia
- McLaughlin, A. 12 Bad Things That Happen to Your Health When You Stop Having Sex. Para Livestrong [Revisado el 19 de Febrero de 2018]