El modo en que los bloqueadores de carbohidratos prometen hacernos perder peso es bastante sencillo: al impedirnos sintetizar temporalmente los hidratos de carbono complejos, el cuerpo acaba por tomar solo lo esencial de ellos, sin absorberlos completamente, evitando de este modo que engordemos.
Como todo suplemento que se hace popular entre grupos específicos de dietistas, estos bloqueadores son todavía algo desconocido para el gran público. Sintetizamos sus aspectos fundamentales: su funcionamiento, su seguridad y su modo de utilización.
¿Cómo funcionan los bloqueadores de carbohidratos?
Los suplementos bloqueadores de carbohidratos suelen ser extraídos de compuestos de fasolina de alimentos como los frijoles. Estos compuestos entran al cuerpo y bloquean las enzimas encargadas de procesar los hidratos de carbono complejos (pan, papa, arroz o pasta), para que dichas enzimas tengan menos tiempo de absorberlos y liberarlos en la sangre.
Al bloquear las enzimas, el cuerpo no puede absorber los hidratos de carbono por completo como tradicionalmente lo hace. En cambio, estos pasan directamente al tracto digestivo, de donde son expulsados sin que el cuerpo pueda absorber sus calorías y sin comprometer sus niveles de azúcar en sangre, al menos en teoría.
¿Qué efectos tienen los bloqueadores de carbohidratos en el organismo?
1. Pérdida de peso
Este factor no está libre de opiniones encontradas. Los bloqueadores de carbohidratos suelen ser promocionados bajo la premisa de que con ellos podremos comer cuantos carbohidratos queramos. Si bien han demostrado ser útiles como método para adelgazar, estos suplementos no son infalibles, y algunos estudios han señalado resultados diversos que vale la pena considerar.
Un primer factor a señalar es que los bloqueadores de carbohidratos han demostrado ser efectivos sobre un 50% o 65% de las enzimas que procesan los hidratos de carbono complejas. Pero esto no quiere decir que las enzimas «bloqueadas» temporalmente no podrán absorber los carbohidratos en algún momento. En este sentido, al estudiar un bloqueador de carbohidratos fuerte, se comprobó que si bien bloqueaba el 97% de las enzimas, solo prevenía la absorción del 7% de los carbohidratos ingeridos.
Además los carbohidratos complejos bloqueados por estos suplementos suelen representar un problema menor que el que significan, por ejemplo, los azúcares compuestos, a la hora de hablar de pérdida de peso
Pese a esta evidencia, no se puede dejar de señalar que existen otros estudios que demuestran la efectividad de los bloqueadores de carbohidratos para ayudar a perder peso, aunque en menor escala. Se ha demostrado que su uso puede generar un promedio de pérdida de peso de entre 2 y 3 kilos, lo cual es un margen pequeño, pero útil.
2. Reducción del apetito
Un efecto colateral de los bloqueadores de carbohidratos es afectar a las hormonas que generan sensaciones de hambre o saciedad, alterando así nuestro apetito natural.
Una explicación para esto es que los compuestos de frijoles de los que suelen estar hechos estos suplementos contienen fitohemaglutinina, una lectina que aumenta el número de hormonas del apetito.
Un estudio en ratas demostró además que los bloqueadores de carbohidratos pueden producir un rechazo gradual por las grasas o el azúcar, aunque no hay estudios en humanos que confirmen esto claramente.
3. Reducción de los niveles de azúcar en sangre
Si bien los bloqueadores de carbohidratos son promocionados como «reductores de peso», su uso para reducir el azúcar en la sangre puede ser igual o más significativo.
Al volver lenta la digestión de hidratos de carbono complejos, los bloqueadores de carbohidratos también reducen el azúcar que entra a la sangre. No obstante, este principio solo se cumple con los carbohidratos que son bloqueados de manera efectiva.
4. Aumento de almidón resistente en el organismo
Este efecto no intencional, o al menos no publicitado de los bloqueadores de carbohidratos, sugiere que al consumirlos aumentamos la presencia de almidón resistente en el intestino grueso.
Al igual que la fibra, el almidón resistente es un tipo de carbohidrato que no puede ser digerido en el intestino delgado, y que tiene efectos positivos para la digestión y la pérdida de peso.
Al bloquear la absorción de carbohidratos complejos en el intestino delgado, los bloqueadores de carbohidratos permiten que estos pasen más fácilmente al intestino grueso, y actúen así como lo hace el almidón resistente.
¿Los bloqueadores de carbohidratos son seguros?
Siempre que se compren en una tienda confiable, los bloqueadores de carbohidratos no suponen un riesgo para la salud. En caso contrario, algunos efectos secundarios para la salud derivados de su consumo podrían ser los siguientes:
- Diarrea.
- Hinchazón abdominal.
- Flatulencia.
- Calambres.
- Reducción no deseada de los niveles de azúcar, especialmente en casos de pacientes con diabetes que no ajusten antes su dosis de insulina.
De cualquier modo, estos efectos secundarios suelen ser producto de gases durante el proceso de absorción, o responden a causas propias de la salud de cada persona. No son peligrosos y no suelen prolongarse por mucho tiempo.
Acudir a una tienda de confianza y a un suplemento avalado en su etiqueta por federaciones médicas o alimentarias es un primer paso muy importante para asegurarnos de la seguridad de los bloqueadores de carbohidratos.
Conclusión
Si bien los bloqueadores de carbohidratos tienen efectos positivos menores como reforzar la pérdida de peso o ayudar a controlar los niveles de azúcar, aún no se ha demostrado cuáles de ellos podrían tener algún efecto real a largo plazo, con lo que su consumo sigue siendo una cuestión de criterio propio.
Por otra parte, hay que insistir en el hecho de que estos suplementos son justamente eso: suplementos. En ningún caso deben ni pueden sustituir los beneficios de una alimentación sana a largo plazo.
Referencia
- Taylor Jones. What Are Carb Blockers and Do They Work?. Para Authority Nutrition. [Revisado en julio de 2016]