En estos momentos, el desperdicio de alimentos es un gran problema. De hecho, casi un tercio de todos los alimentos producidos en el mundo se desperdicia por varias razones. Eso equivale a casi 1.3 billones de toneladas cada año.
De acuerdo a la Agencia de Protección Ambiental de los Estados Unidos, en el año 2010 una persona promedio generó alrededor de 99 kilogramos de desperdicio de comida, lo cual se traduce en un gasto innecesario de dinero en comida.
Por otra parte, los alimentos desechados se envían a los vertederos, lo que resulta en la producción de gas metano; el segundo gas de efecto invernadero más común en el mundo. En otras palabras, desechar la comida también contribuye al cambio climático, un grave problema ambiental en la actualidad.
Descubre 7 formas sencillas de reducir el dinero que gastas en comida, además de contribuir en disminuir los daños implicados por desperdiciar alimentos.
7 consejos para ahorrar el dinero que gastas en comida
1. Compra inteligentemente
La mayoría de las personas tienden a comprar más alimentos de los que necesitan. Aunque la compra en cantidad puede ser conveniente, la investigación ha demostrado que este método de compra conduce a un mayor desecho de alimentos.
Para evitar adquirir más alimentos de los que necesitas, realiza viajes con frecuencia a la tienda de comestibles en lugar de hacer un viaje una vez por semana para comprar una cantidad mayor. También se recomienda hacer una lista de los artículos que necesitas comprar y adherirse a esa lista. Esto ayudará a reducir la compra por impulso y a reducir el desperdicio de comida.
2. Almacena los alimentos adecuadamente
El almacenamiento inadecuado de alimentos conduce a una gran cantidad de desperdicio de alimentos. Según el Natural Resource Defense Council, aproximadamente dos tercios de los residuos domésticos en Reino Unido se debe a la descomposición de alimentos.
Muchas personas no están seguras de cómo almacenar frutas y verduras, lo que puede conducir a una maduración prematura y, finalmente, al desecho de las mismas. Por ejemplo, las papas, tomates, ajo, pepinos y las cebollas nunca deben refrigerarse, sino mantenerse a temperatura ambiente. También debemos separar los alimentos que producen más gas etileno de los que no lo hacen: es otra gran manera de reducir el deterioro de los mismos. El etileno promueve la maduración y podría provocar su deterioro.
2.1 ¿Qué alimentos producen más gas etileno?
Los alimentos que producen gas etileno son los siguientes:
- Plátanos.
- Aguacates.
- Tomates.
- Melocotones.
- Peras.
- Cebollas verdes.
Mantén estos alimentos alejados de los productos sensibles al etileno como las papas, manzanas, vegetales de hojas verdes, bayas y pimientos para evitar el deterioro prematuro.
3. Aprende a conservar alimentos
Puedes pensar que la fermentación y el encurtido son modas nuevas, pero las técnicas de conservación de alimentos se han utilizado durante miles de años. Por ejemplo, el decapado, un tipo de método de conservación que usa salmuera o vinagre, se ha utilizado antes de Cristo.
Algunas técnicas de conservación adicionales al decapado son el secado, enlatado, fermentación, congelación y curado, las cuales puedes utilizar para hacer que los alimentos duren más tiempo, lo que reduce el desecho de comida.
Estos métodos no solo reducirán tu huella de carbono, sino que también te ahorrará dinero. Además, la mayoría de las técnicas de preservación son simples y pueden ser divertidas. Por ejemplo, enlatar un exceso de manzanas maduras y convertirlas en compota o encurtir zanahorias frescas, te proporcionará un tratamiento delicioso y duradero que incluso los niños disfrutarán.
4. Mantén la nevera en orden
Tener una nevera bien abastecida puede ser bueno, pero una nevera demasiado llena puede ser perjudicial cuando se trata del desecho y gasto innecesario de dinero en comida.
Ayuda a evitar el deterioro de los alimentos manteniendo organizada tu nevera para que puedas ver claramente los alimentos y saber cuándo los compraste.
Por ejemplo, cuando compres una nueva caja de bayas, coloca el paquete más nuevo detrás de la anterior. Esto ayuda a garantizar que los alimentos más viejos se usen y no se desperdicien.
5. Consume la piel de verduras y frutas
Con frecuencia, las personas eliminan las cáscaras de frutas y vegetales cuando preparan las comidas. Hacer esto no es bueno debido a que muchos nutrientes se encuentran en la capa externa del producto.
Por ejemplo, la piel de la manzana contiene una gran cantidad de fibra, vitaminas, minerales y antioxidantes. De hecho, los investigadores han identificado un grupo de compuestos presentes en cáscaras de manzanas llamados triterpenoides, que actúan como potentes antioxidantes en el cuerpo, y pueden tener propiedades para combatir el cáncer.
6. Guarda las semillas
La gran cantidad de semillas de calabazas producidas en los Estados Unidos cada año, terminan siendo desechadas. Sin embargo, sembrar y guardar estas semillas puede ser divertido para toda la familia. De hecho, las semillas de calabaza son sabrosas y están llenas de nutrientes ya que, además de ser utilizadas para elaborar recetas y horneado, es una buena manera de reducir los desechos de alimentos.
Para guardar las semillas de calabaza, simplemente lávalas y sécalas, luego acompáñalas con un poco de aceite de oliva y sal para luego conservarlas.
7. Mezcla el agua que tomas con otros ingredientes
Muchas personas no beben suficiente agua simplemente porque carece de sabor. Afortunadamente, puedes hacer del agua algo más sabrosa y reducir el impacto de desperdicio de alimentos al mismo tiempo.
Uuna de las maneras más fáciles de aumentar la ingesta de agua es hacer que tenga sabor. Para ello, usa cáscaras de cítricos, manzanas y pepinos para agregar sabor a tu vaso de agua.
Las hierbas marchitas y las copas de bayas también son excelentes opciones para colocar a tu botella de agua. Después de terminar de beber el agua, mezcla las frutas o hierbas sobrantes en un batido para obtener un impulso nutricional sin desperdicio.
Referencia
- Kubala, J. 20 Easy Ways to Reduce Your Food Waste. Para Healthline [Revisado en noviembre de 2017]
