Seguro que te suena familiar: empiezas una dieta y has logrado quitarte un poco de peso, pero acaba por no servir de nada y vuelves a ganar lo que perdiste, incluso algo más. Es la historia de nunca acabar. Sin embargo, existen maneras de terminar con este círculo vicioso de una vez por todas.
¿Cómo? El secreto está en dejar de lado lo que te han enseñado sobre las dietas. Una dieta no es una prueba mental, ni una tortura física. Solo una mala dieta te hará recuperar todo el peso que perdiste.
¿Por qué la mayoría de dietas no funcionan?
Charlotte Markey, profesor de psicología en Rutgers University – Camden, ha estado investigando la alimentación y dietas por más de 15 años y nos recomienda abordar el tema de una forma más moderada.
“Una gran cantidad de evidencias científica nos han enseñado que las dietas no estimulan una verdadera pérdida definitiva de peso. De hecho, la mayoría de personas que han seguido una dieta cuando las abandonan acaban ganando más peso del que lograron bajar”.
La clase de dietas a las que Markey se refiere son aquellas que implican comer porciones mas pequeñas, limitando las calorías, eliminando grupos enteros de comida como los carbohidratos o alimentos azucarados.
Además, todos sabemos que hacer dieta es bastante frustrarte. “Gastar un montón de energía pensando que puedes comer o que debes evitar causa que pierdas fuerza de voluntad. Los estudios muestran que las personas a dieta les cuesta más aprender cosas, resolver problemas y tener un mayor autocontrol”, nos dice Markey.
Además, un estudio reveló que 121 mujeres a las cuales se les limitó cierta cantidad de calorías, sufrieron un aumento del cortisol, hormona relacionada con el estrés, por lo que está claro que en muchos casos seguir una dieta restrictiva es contraproducente y muy difícil de mantener al día.
Las dietas pueden hacerte ganar peso
Sí, has leído bien, las dietas pueden llegar a hacer que ganes peso. En 2013, un informe sobre personas no obesas descubrió que lo que las dietas realmente llegaron a producir era un aumento de peso, en vez de una disminución del mismo.
En 2010 un estudio, demostró este efecto; personas que estaban a dieta y tomaban un trozo de pizza tenían mayor tendencia a comer después más galletas que aquéllas personas, que sin estar a dieta, tomaban la misma cantidad de pizza.
Ésto sucede porque cuando sigues una dieta te sientes privado de consumir ciertos alimentos, por lo que puedes tener más propensión de romperla y producir que te des atracones, haciéndonos tirar todo por la borda. Esto nos lleva a plantearnos: “¿qué está pasando?”.
¿Debo eliminar algunos alimentos de mi dieta?
Quitar ciertos alimentos puede hacer que tengas más ganas de comerlos. El intentar no comer ciertos alimentos provoca que las personas piensen más en ellos, de acuerdo a las investigaciones. Aunque suene contradictorio, el comer ciertos alimentos que consideras como “prohibidos” pueden llegar a ayudarte a perder más peso a largo plazo que si lo eliminases por completo.
Ésto se confirma con un estudio realizado en 2012 con 193 personas obesas. La mitad de ellos tomaron un desayuno bajo en calorías y la otra mitad un desayuno normal en una cantidad normal de calorías. Después de cuatro meses, ambos grupos perdieron hasta 13 kg. Pero los siguientes cuatro meses, el grupo que había estado comiendo desayunos con bajas calorías volvieron a ganar mas de 11 kg, mientras que el grupo del postre perdió hasta otros 6 kg.
¿Cómo puedo perder peso?
La solución es llevar a cabo pequeños cambios que te permita lidiar con ello. “Gran parte de la comunidad de investigadores apoyan la idea de hacer cambios simples y graduales: «es la mejor forma de llegar a perder peso” escribe Markey.
Conclusión
No te dejes llevar por tendencias ni promesas irreales, el camino para perder peso es mucho más sencillo de lo que nos pensamos, aunque no siempre es tan rápido como nos gustaría. Si una dieta te prohíbe un grupo importante de alimentos, te propone calendarios de comida poco saludables o limita extremadamente el número de calorías que tomas (por favor, no probéis dietas basadas solo en líquidos, por mucho que os prometan) a la larga, nunca te hará perder peso. Para evitar ésto, prueba a hacer pequeños cambios en tu alimentación para bajar de peso y no recuperarlo nunca más.
Referencias
- Tanya Lewis, Here’s the real reason so many diets don’t work. Para BusinessInsider [Revisado en Octubre de 2015].