Los primeros minutos de tu día de trabajo son fundamentales para tu productividad durante las próximas ocho horas. Si llegas tarde a la oficina u otro motivo que perturbe tu día laboral puede provocarte problemas de concentración durante el resto del día. Esto puede provocar frustración y desmotivación durante tu jornada laboral, e incluso llevar el mismo ánimo a tu hogar.
Te damos a conocer 10 maneras de empezar tu jornada laboral y no desviarte de tu camino, y de esta manera, comprometerte con el éxito. Solo debes seguir los siguientes consejos y te aseguramos que tu día laboral será mucho mejor del que esperas.
10 cosas que debes hacer antes de empezar tu jornada laboral
1. No llegar tarde
Podrías estar saboteando tu día de trabajo antes de que comience. Un estudio reciente, encontró que los empleados que llegan atrasados a sus trabajos tienen índices de rendimiento más bajos, incluso si se van más tarde del trabajo. Así que de ahora en adelante trata de llegar a tu destino de trabajo a tiempo.
2. Saludar a tus compañeros de trabajo
Saluda a las personas que te rodean en tu ámbito de trabajo con un tono agradable. Si eres un líder y no dices “hola” a tu equipo de trabajo, estarás aparentando tu falta de habilidad para relacionarte con las personas y esto podría socavar tu competencia técnica. Incluso si no eres un gerente, permanecer en silencio a tu llegada podría hacerte parecer menos accesible a tus colegas.
3. Beber café
Si no eres del tipo de persona que toma café apenas al despertar, es probable que lo hagas tan pronto que entres en la oficina. Sin embargo, existen investigaciones que sugieren que el mejor momento para beber café es después de las 9:30 am. Esto se debe a que la hormona del estrés cortisol, por lo general regula la energía entre las 8:00 am y 9:00 am. Cuando tomas una taza de café durante este tiempo, el cuerpo comienza a producir menos cortisol y dependes más de la cafeína.
Una vez que sus niveles de cortisol empiecen a disminuir después de las 9:30 de la mañana, es posible que realmente necesites un impulso de cafeína.
4. Verificar tus correos electrónicos
Una vez que te instalas en tu silla de trabajo, es tentador sumergirse directo a la gran cantidad de mensajes que llegaron durante la noche. No obstante, los 10 minutos de la jornada de trabajo se deben gastar rápidamente en escanear tus correos y dar prioridad a los correos electrónicos importantes.
De esta manera puedes verificar si existe algo urgente y crear un plan, además de organizarse, para responder el resto más tarde. Comprobar a cada momento los correos electrónicos puede convertirse en una de esas tareas que te hacen sentir que has logrado cosas, sin embargo el peligro es que dejes de lado las tareas que son realmente importantes.
5. Tener a punto la lista de tareas
Al llegar al trabajo debes organizarte y tener una idea clara hacia dónde te vas a dirigir. Esto incluye escribir tus principales prioridades del día y revisar tu calendario. Comprueba qué eventos tienes y si es necesario prepararse para cualquier llamada o conferencia. De lo contrario, podrías estar en serios problemas cuando recibas un recordatorio de 10 minutos para una reunión de equipo y tengas que escribir una propuesta de proyecto justo unos minutos antes.
6. Realizar las tareas más difíciles primero
Existen investigaciones que sugieren que tu energía y fuerza de voluntad tienden a marcar como avanza tu día. Es por eso que es crucial que las tareas más importante del día lo realices lo más pronto posible. Como dice la cita de Mark Twain “Come una rana viva en la mañana, y nada peor te pasará el resto del día”.
7. No realizar multitareas
Debido a que tienes mucha energía en la mañana, puede sentir que puedes realizar un millón de cosas al vez. No obstante, las investigaciones sugieren que realizar multitareas puede afectar el rendimiento en la tarea primaria, y que es mucho mejor realizar una cosa a la vez. Si comienzas tu jornada laboral haciendo malabares con diferentes tareas, podrías retrasar el resto del día.
En su lugar, céntrate en una sola tarea durante los primeros 10 minutos para obtener mejores resultados.
8. Dejar tus pensamientos negativos a un lado
Quizás en tu camino al trabajo tuviste alguna mala experiencia con alguien, o tal vez peleaste la noche anterior con tu pareja.No permitas que esas malas experiencias te distraigan de las tareas que debes realizar hoy. Pon estos pensamientos negativos en una “caja” por separado. Si es necesario puedes volver a ellos más tarde.
9. Tener reuniones a mitad de la tarde
Las reuniones por la mañana podrían ser una pérdida de tus recursos cognitivos. Las personas exitosas antes de tomar su desayuno reservan su energía, y ponen su atención y concentración en tareas como la escritura. Si tienes algo que decir en alguna reunión con tu jefe y compañeros de trabajo, asegúrate que están programadas para una hora donde tengas baja energía como la mitad de la tarde, a menos que sepas que requieren una gran cantidad de energía mental.
10. Seguir una rutina
Los científicos dicen que tus recursos cognitivos son limitados, por lo que debes utilizarlos de forma racional. Si pasas tiempo al iniciar tu jornada laboral en decidir qué debes hacer primero, tendrás menos energía mental más adelante. Por contra, el adherirse a una rutina permite que tu cerebro funcione en modo automático durante un tiempo, por lo que apenas utilizas energía mental. Como dice Charles Duhigg, autor de la “La fuerza de la costumbre”, la rutina básicamente nos da la libertad mental para pensar en lo que es realmente importante.
Referencia
- Shana Lebowitz, 10 Misakes You Might Be Making In The First 10 Minutes Of The Workday. Para Businessinsider [Revisado en Abril de 2016]