Los estudios estiman que la enfermedad de la glándula tiroides es más común que la diabetes o la enfermedad cardíaca y que a menudo se diagnostica erróneamente o no se detecta.
Esta pequeña glándula en la base del cuello controla las funciones en todo el cuerpo, incluida la regulación de otras hormonas, los niveles de energía y el metabolismo.
La disfunción de la tiroides puede causar estragos, creando síntomas incómodos si los niveles de hormonas permanecen fuera del rango. Comprender los síntomas comunes de los problemas de la tiroides y cuándo acudir al médico puede salvar tu salud. Por ello, descubre si la tiroides es la responsable de tus problemas de salud.
Síntomas que indican un problema de tiroides
Los síntomas asociados con una enfermedad de la tiroides a menudo son causados por niveles bajos de esta hormona, también conocidas como hipotiroidismo, que incluyen aumento de peso o incapacidad para perder peso, sensibilidad al frío, debilidad o fatiga, depresión, palidez, estreñimiento, mala memoria, piel y cabello secos y uñas quebradizas.
Los signos de la condición menos común de la tiroides hiperactiva (hipertiroidismo) incluyen pérdida de peso involuntaria, ritmo cardíaco acelerado, presión arterial alta, ansiedad o irritabilidad, temblor, insomnio, sensación de calor o sudoración más de lo normal y debilidad muscular.
Otros síntomas potenciales de la tiroides incluyen dolor en la base del cuello o garganta e hinchazón o un bulto debajo del área de la nuez de Adán. Cualquier dolor o inflamación debe ser motivo de consulta médica de inmediato.
¿Qué es el hipotiroidismo?
La baja actividad de la tiroides también se conoce como hipotiroidismo, y generalmente es causada por una enfermedad autoinmune llamada enfermedad de Hashimoto, un problema en el cual el cuerpo ataca su propio tejido tiroideo y no produce los niveles hormonales para una salud óptima.
Si tienes síntomas de actividad de tiroides baja, tu médico puede realizar algunas pruebas para ver si puedes tener la enfermedad de Hashimoto u otras formas de hipotiroidismo. Los niveles elevados de hormona TSH se usan para diagnosticar hipotiroidismo u otra condición llamada «hipotiroidismo subclínico«, que el European Thyroid Journal describe como niveles aumentados de la hormona TSH con niveles normales de hormonas T3 y T4.
¿Qué es el Hipertiroidismo?
La tiroides hiperactiva también se conoce como hipertiroidismo y es menos común que la disfunción tiroidea baja.
A menudo es causada por una afección autoinmune llamada enfermedad de Graves, que hace que el cuerpo produzca demasiada T4. Nuevamente, esto es más común en mujeres que en hombres, y los síntomas se presentarán con pérdida de peso involuntaria, latidos cardíacos rápidos o temblores, presión arterial alta, ansiedad o irritabilidad y problemas para dormir.
Si presentas estos síntomas, dirígete al médico para que te hagan un análisis de sangre para evaluar la función tiroidea.
Cáncer de tiroides y bocio
El dolor en el cuello o la garganta, la hinchazón o una voz ronca son razones para controlar la tiroides. El cáncer puede presentarse a través de nódulos, aunque la Sociedad Americana del Cáncer asegura que la mayoría de los nódulos tiroideos son benignos o no cancerosos.
El cáncer de tiroides es el quinto cáncer más común en las mujeres, y los tratamientos típicos incluyen cirugía y yodo radioactivo. Es un tipo de cáncer que se diagnostica a una edad más temprana en comparación con otros tipos: dos tercios de todos los casos se diagnostican en personas menores de 55 años.
El bocio, por su parte, es causado por la falta de yodo mineral y causa un gran bulto inflamado en la base de la garganta. Con bocio, la glándula tiroides se agranda a medida que busca yodo. De este modo, cualquier signo de hinchazón o dolor en el área de la tiroides debe evaluarse de inmediato.
Pruebas de la función tiroidea
Si buscas atención médica para tu tiroides, escucharás términos como «T3», «T4» o «TSH», pero, ¿qué significan?
T3 significa triyodotironina y T4 significa tiroxina. El T4 está hecho de T3, por lo que es importante revisar ambos niveles.
La glándula tiroides y la glándula pituitaria en el cerebro se comunican constantemente, y la pituitaria le dice a la tiroides los niveles hormonales correctos para bombear. Este mensaje se envía a través de la TSH (hormona estimulante de la tiroides).
El nivel de TSH se usa para diagnosticar hipotiroidismo porque se elevará con esta condición. El equilibrio ideal entre T3, T4 y TSH creará armonía en el cuerpo, pero los niveles altos o bajos pueden indicar un problema con una enfermedad, medicamentos o daño en la hormona tiroidea. Si se sospecha que hay problemas con los nódulos tiroideos, el médico es posible que pida una ecografía de la zona.
Tiroides y peso corporal
Algunos estudios han demostrado una correlación entre el aumento de peso corporal y el hipotiroidismo.
En un gran estudio en el BioMed Central Endocrine Disorder Journal, los niveles elevados de hormona de la TSH estaban fuertemente asociados con el síndrome metabólico, un conjunto de síntomas asociados con el desarrollo de enfermedades cardiovasculares y la diabetes tipo 2. Además, en el mismo estudio se asoció una circunferencia de cintura más alta con hipotiroidismo o función tiroidea baja.
En dicho estudio, algunos casos con TSH en el rango normal mostraron un aumento en el peso con cada aumento de una unidad en la hormona TSH. Esto significa que a medida que los niveles de TSH aumentan, el peso aumenta junto con él.
No obstante, si bien hay investigaciones que muestran una relación entre el hipotiroidismo y el aumento de peso y la grasa abdominal, muchas personas asocian falsamente las luchas con el peso asociadas con la disfunción tiroidea, y es que el control del peso puede ser difícil y multifactorial, por lo que definitivamente debes hablar con tu médico.
Ayuda médica para tratar la tiroides
Si crees que puedes tener un problema de tiroides, coméntaselo a tu médico. Definitivamente, deben abordarse los grupos de síntomas de hipotiroidismo o hipertiroidismo. Por ejemplo, sentir frío constantemente, luchar contra el sobrepeso, piel seca, uñas quebradizas, fatiga o depresión podría indicar una glándula tiroides poco activa.
Un médico evaluará la función tiroidea con algunos análisis de sangre simples y podría sugerir una ecografía u otra prueba de monitorización para revisar esta glándula fundamental y descartar la enfermedad tiroidea.
Referencia
- Hultin, G. Could Your Thyroid Be the Culprit? Everything You Need to Know About Thyroid Disease. Para Livestrong [Revisado en noviembre de 2018]