¿Hace tiempo que no tomas unas buenas vacaciones? ¿Tienes algunos días almacenados en el trabajo? Pues, no esperes más y ¡tómalas!
Tomar vacaciones no es una cuestión de gustos sino de necesidad. No son solo un tiempo para distraernos y escapar de la realidad y la rutina: los estudios demuestran que son necesarias para mantener nuestro cuerpo y mente sanos, así como nuestro espíritu.
No es necesario tomar unas lujosas vacaciones en las islas griegas. Unas vacaciones pueden ser tan simples como un fin de semana largo en cualquier sitio cerca de tu localidad, una escapada a la playa o, una acampada en el lago. El objetivo es tomar un descanso de la rutina diaria, la monotonía y los hábitos.
Así que empaca tu traje de baño, busca tus gafas de sol, haz tus reservas y descubre las ventajas de tomarte unas vacaciones cada cierto tiempo.
7 Razones para irte de vacaciones
1. Es un acto desestresante
El estrés crónico de las tareas diarias puede conducir a la fatiga, problemas de sueño y presión arterial alta. Las vacaciones, por su parte, nos permiten olvidarnos de la rutina diaria, de los problemas cotidianos y nos motivan a retomar fuerzas para organizar nuestras vidas con satisfacción.
Tomar tiempo lejos de las presiones diarias puede aliviar el estrés y deshacerse de las hormonas poco saludables que acompañan este tipo de estrés.
Diferentes estudios aseguran que alejarse temporalmente de las tareas diarias y obligaciones nos despejan la mente y nos ofrecen más espacio y tiempo para nosotros del que usualmente tenemos. Un pequeño descanso nos permite hacer actividades que nos gustan y, sobre todo, tiene un efecto favorable en nuestros niveles de estrés.
2. Se fortalecen las relaciones
La vida diaria puede llegar a ser inmensamente estresante, todos lo sabemos. Entre lograr todas las cosas en nuestra lista de tareas pendientes, es difícil encontrar tiempo para concentrarse en las cosas más importantes de la vida: nuestras relaciones.
La clave del éxito de las relaciones es pasar tiempo con otras personas; sin embargo, a menudo priorizamos nuestro trabajo y obligaciones por encima de nuestros amigos, familiares y pareja.
Apagar tu teléfono, tomar un descanso de los correos electrónicos, alejarte de tus obligaciones diarias, y tomarte unas vacaciones te ofrecen el tiempo necesario para volver a conectar con tus seres queridos. Entre otras cosas, viajar durante las vacaciones es una buena actividad para estrechar lazos con aquellos que teníamos olvidados, ya que nos permiten compartir experiencias que nos ayudan a fortalecer las relaciones.
Los estudios demuestran que las personas con fuertes relaciones sociales son menos propensas a sentirse estresadas, agobiadas o deprimidas, y son menos susceptibles de sufrir enfermedades y problemas de salud mental.
3. Estimulan la productividad
Aunque pueda parecer paradójico, tomarte un tiempo libre puede ayudarte a rendir mejor en tu trabajo. El descanso que nos proporcionan unas buenas vacaciones influye en la manera en que regresamos a nuestras obligaciones.
Recientes estudios mostraron que por cada 10 horas de vacaciones que un empleado tomó, su calificación de rendimiento de fin de año mejoró un 8%, y aquellos que tomaron vacaciones frecuentemente también fueron significativamente menos propensos a abandonar la empresa.
Así pues, estar descansados nos otorga la resistencia mental necesaria para continuar trabajando y rendir de manera eficiente en nuestras tareas.
4. Nuestro cerebro se despeja y renueva
Viajar no solo renueva nuestro cuerpo y nuestro entusiasmo por la vida, también ayuda a aumentar nuestra capacidad intelectual.
La mayoría de nosotros realizamos tareas diarias de manera rutinaria que requiere de toda nuestra concentración y eso termina por agotar nuestro cerebro. Además, las tareas repetitivas no nos permiten mucha flexibilidad mental evitando que seamos personas creativas y espontáneas.
Es importante experimentar nuevos lugares. Cuando viajas a un lugar donde nunca has estado automáticamente cambias de igual manera la información en tu cerebro.
Si tu día a día está lleno de correos electrónicos, reuniones y agendas por cumplir, debes dar pronto una tregua a tu mente. Darle a nuestro cerebro un descanso con unas vacaciones otorga un descanso a nuestro cuerpo y mente, permitiéndonos volver al trabajo frescos, con la mente despejada y con mayor disposición a hacer las cosas.
5. Proporcionan una mejor vida sexual
Deja de contestar llamadas cada dos por tres, olvídate del ordenador y la apretada agenda, y en su lugar, reserva un tiempo bajo las sábanas en un lugar paradisíaco junto a tu pareja.
Unas buenas vacaciones ayudan a revitalizar las relaciones de pareja, pues se produce un alivio de la tensión acumulada por las múltiples obligaciones, los problemas de oficina o de pareja.
Una ruptura en los factores estresantes de la rutina diaria sumado a unas buenas vacaciones son la receta perfecta para disminuir síntomas de cansancio laboral como el estrés y la ansiedad, así como potenciar la vida sexual en pareja.
Además, estudios médicos confirman que el sexo proporciona una gran variedad de beneficios mentales y físicos, por lo que también es una excelente excusa para ponernos juguetones estas próximas vacaciones.
6. Mejoraran la salud del corazón
Según varios estudios, existe una relación entre el tiempo de vacaciones y el riesgo de padecer ciertas enfermedades y trastornos.
Tomarse vacaciones regularmente podría reducir los riesgos de padecer enfermedades cardiovasculares. Los estudios afirman que las personas que toman al menos una semana de vacaciones al año son un 30% menos propensas a sufrir ataques al corazón, mientras que las personas que toman al menos unas vacaciones al año, tienen un 20% menos de riesgo de muerte.
Por el contrario, aquellas personas que no toman vacaciones en más de 5 años tienen el mayor número de muertes por problemas cardíacos.
7. Proporcionan un nuevo enfoque
Tranquilo, el mundo no se va a venir abajo si te tomas un descanso de todas tus responsabilidades. De hecho, las nuevas experiencias que podemos disfrutar en vacaciones nos permite aprender sobre la gente y las cosas que nos rodean.
Cuando conocemos diferentes culturas, a través de nuevas experiencias aprendemos a ser más comprensivos y nos ayuda a entender el mundo de otra forma.
También puede ser una buena ocasión para hacer un balance de tu vida, pensar en cómo transcurre tu trabajo y plantearte nuevos objetivos laborales o personales: las vacaciones son el momento ideal para reflexionar sobre tu camino actual y si es verdaderamente la dirección en la que quieres ir.
Estas nuevas perspectivas pueden ser beneficiosas para ti en muchos sentidos, ya que te pueden llevar a cambiar tu mentalidad a la hora de comenzar un proyecto o enfrentar dificultades.
Conclusión
Las vacaciones son buenas para nosotros, nos permiten salir de la rutina, tener tiempo para nosotros mismos y disfrutar de esas actividades que tanto nos gustan y nos hacen sentir bien. Además de eso, tomar un descanso del trabajo trae consigo otro sin fin de beneficios para la salud.
Si no hay una adecuada salud mental, no podemos decir que hay salud integral de la persona, por eso es recomendable de vez en cuando recetarse unas merecidas vacaciones del trabajo, darle un break a nuestra rutina y salir a disfrutar.
Referencias
- Collette Stohler. 11 Reasons Taking a Vacation Can Make You Healthier. Para Livestrong [Revisado en Febrero de 2017]
