A muchas personas se les hace difícil comer tubérculos, ya que los consideran desabridos o simplemente no les gusta cómo se ven. Sin embargo, consumir tubérculos es necesario ya que aportan vitaminas y minerales y puede ayudar a reducir la inflamación y embellecer la piel.
Afortunadamente, estas deliciosas recetas te van a convencer de añadir cada vez más tubérculos en tu alimentación diaria, ya que no solo obtendrás buenos beneficios para tu salud, sino que además conseguirás encantar tu paladar y el de tus invitados.
El secreto para que los tubérculos sean muy sabrosos está en la preparación y la presentación que puedas realizar.
4 maneras de que consumir tubérculos sea sabroso
1. En sopa
Una de las mejores maneras de consumir tubérculos es en sopa, ya que es mucho más fácil digerirlos, y como lo estás preparando con otro tipos de alimentos les puedes disfrazar el sabor.
Una sopa muy sabrosa hecha a base de tubérculos es la sopa de alcachofa de Jerusalén.
Las alcachofas de Jerusalén también conocidas como alcachofas canadienses, favorecen la digestión, aumentan la fibra y el potasio del organismo, ayudan a reducir el riesgo de accidentes cerebro vascular y la presión arterial.
Adquirir todos los beneficios de la alcachofa es muy fácil, ya que este tubérculo es dulce y tiene un sabor a nuez. Para realzar su sabor dulce puedes usar un poco de yogurt o menta fresca.
Ingredientes de la sopa de alcachofa de Jerusalén
- 6 tazas de alcachofas de Jerusalén.
- 2 patatas rojas.
- 1/2 cebolla blanca.
- 1/4 cucharadita de sal y otro 1/4 cucharadita de pimienta negra.
- 3 dientes de ajo.
- 2 tazas de caldo de pollo.
- 1/2 tomate.
- 3 cucharadas de vinagre blanco.
- 1/2 cucharada de jugo de limón.
- 1/2 taza de yogurt.
- 1 cucharada de perejil.
Preparación
- Precalienta el horno a 180 grados.
- Coloca una hoja grande de papel de aluminio, rocía las alcachofas, patatas, cebollas y ajo con aceite de oliva y colócalos sobre el papel de aluminio.
- Sazona con sal y pimienta, envuelve herméticamente, mételo al horno y cocínalo durante 25 minutos.
- Introduce los vegetales en una licuadora, agrega el caldo de pollo, el tomate, el vinagre y el jugo de limón y remuévelo hasta que obtengas una mezcla completamente homogénea.
- Lo puedes servir con una cucharada de yogur, un poco de menta fresca, perejil o albahaca.
2. Asados
Esta técnica de cocción hace que los alimentos se cocinen de forma homogénea durante un tiempo prolongado, por lo cual el tubérculo mantiene su frescura y su suave y delicado sabor.
Afortunadamente, existe una gran gama de tubérculos, y todos los puedes preparar asados, pero en especial se recomiendan los nabos asados, ya que con el puedes preparar una comida similar a las papas fritas. De este modo, estarías reduciendo considerablemente el consumo de calorías ya que una porción de papas fritas contiene aproximadamente 365 calorías, mientras que una porción de nabos contiene 75 calorías. Además los nabo, tienen un buen sabor ya que son ligeramente dulces y son una buena fuente de fibra, zinc y vitamina C.
Ingredientes de los nabos asados
- 1 nabo mediano, crudo.
- 3 cucharadas de aceite vegetal.
- 1 1/2 cucharadita sal y 1 1/2 cucharadita de pimienta negra molida.

Preparación
- Precalienta el horno a 250°.
- Pela el nabo y pícalo en ¼ de pulgada de espesor similar a las papas fritas.
- Cubre una bandeja con papel aluminio y, en una bolsa grande de plástico con cierre hermético añade 1 ½ cucharaditas de aceite y sazona con la sal y la pimienta.
- Añade los nabos, ciérrala y mézclalos bien.
- Extiéndelo uniformemente en la bandeja hornéalo durante 20 minutos.
- Repite con el resto de los nabos.
3. En puré
Los más pequeños de la casa te van agradecer que prepares los tubérculos en forma de puré, ya que así será mucho más fácil digerirlos, y si le pones un poco de queso, mantequilla o algún ingrediente que le guste a los niños, le mejorarás mucho más el sabor.
Par preparar un puré de tubérculos, se recomienda mezclar el apio nabo con cebollín, el cual es muy nutritivo y sabroso. Esta receta es originaria de Irlanda del Norte y tiene una preparación sumamente sencilla ya que consiste simplemente en mezclar el apio con el cebollín.
Ingredientes del puré de apio nabo y cebollino
- 2 tazas de apio nabo crudo.
- 1 diente de ajo machucado.
- 1/2 taza de leche descremada.
- 1/4 cucharadita de sal.
- 3 cebollines medianos, picado en trozos pequeños.
- 1/4 cucharadita de pimienta negra.
Preparación
- Pon a hervir agua en una olla pequeña, mientras hierve pela el apio y pícalo en cuatro pedazos.
- Colócalo en agua hirviendo durante 15 minutos, luego retíralo y ponlo a escurrir. Después debes hacer un puré con el apio.
- Añade el ajo machucado, el cebollín, la sal y la leche en una olla a fuego medio bajo.
- Agrega pimienta al gusto y espera que la mezcla se espese un poco.
- Mezcla todos los ingredientes y ya podrás disfrutar de este excelente plato.
4. En encurtidos
Lo mejor de preparar los tubérculos en forma de encurtido es que los podemos disfrutar a cualquier hora del día y que tienen una preparación sumamente sencilla.
Una buena receta de tubérculos en encurtido es la remolacha, ya que queda muy sabrosa y además contiene vitamina C y magnesio, que ayudan a formar colágeno y controlar la presión arterial. Las remolachas son también una buena fuente de fibra
¿Cómo puedo preparar las remolachas encurtidas?
Ingredientes
- 3 tazas de remolacha cruda.
- 8 cucharadas de aceite de oliva extra virgen.
- 1 taza de vinagre o vino blanco fino y 1 taza de agua.
- 1/4 cucharadita de sal.
- 1/2 cebolla blanca, picada en ruedas.
- 1/4 cucharadita de mostaza en polvo y otro 1/4 de pimienta negra.
Preparación
- Precalienta el horno a 200°.
- Lava, pela y quítale el tallo a las remolachas. Coloca las remolachas en una hoja grande de papel de aluminio y agrégale 2 cucharadas de aceite de oliva.
- Cubre con el papel aluminio y mételo al horno durante 35 minutos. Retíralo y déjalo enfriar.
- Mezcla el vinagre, el agua y la sal en una olla y ponlo a hervir a fuego medio, luego retíralo.
- Usa guantes de goma para agarrar las remolachas y colócalas en un recipiente, agregando las cebollas y la mezcla de vinagre, hasta que toda la remolacha este cubierta por el liquido.
- Cuando el líquido se enfríe, colócalo en el refrigerador.
Referencia
- Arthur Bovino. 9 Ways to Make Root Vegetables Anything but Boring. Para livestrong [Revisado en abril 2017]